Ir al contenido principal

Reseña: «Holding The Stage: Road Shows, Vol. 4», de Sonny Rollins


El Coloso. El Hombre.








La música de Sonny Rollins es un regalo. Él es un regalo. Su persona debería estar protegida por la UNESCO.



Este cuarto volumen de la serie Road Shows contiene una serie de características que lo diferencian de las anteriores entregas. Rollins es tan consciente de ello que nos avisa desde antes de escuchar el disco: el título contiene una advertencia y una confesión (Holding The Stage [algo así como «aferrándose al escenario»]) y la portada rompe el diseño de la serie con la elección de una imagen de Rollins.


También la selección de los temas (directos a lo largo de más de tres décadas) confronta los conocidos estándares perfeccionistas del coloso: ojo, esto no tiene la más mínima relación con la calidad de las actuaciones sino con circunstancias en el sonido de las últimas dos piezas del álbum que Rollins jamás habría permitido. De hecho fueron vetadas por él mismo de la publicación a la que deberían haber pertenecido: Without A Song: The 9/11 Concert, el histórico directo en el Berklee Performance Center de Boston cuatro días después del 11S, fecha sobre la que volveremos más adelante, pues nos ofrece posibles claves para entender hechos musicales y personales que este cuarto volumen de la serie Road Shows revela.

El disco comienza con el imbatible tándem Rollins-Ellington y el inventivo ejercicio del saxofonista mimando y refrescando el estándar ducal In A Sentimental Mood. Quienes asistieron a aquel concierto en Londres (2007) atestiguaron la magia que crea Rollins durante sus solos, cuando su improvisación es más pura: 5 minutos de ejercicio caleidoscópico, de descripción, creación, emoción y coherencia.









El optimismo de Professor Paul, homenaje a Paul Jeffrey, nos servirá de desprevenido puente hacia el último directo de Rollins del que existe constancia editada, gracias a este Volumen 4 de Road Shows. El tema corresponde a un concierto en Praga en 2012, meses antes de que una fibrosis pulmonar hiciera al Coloso dejar los escenarios.







Esta pieza cuenta mucho sobre Rollins: el músico y el hombre. Su título: Mixed Emotions.
Se trata de uno de los temas más breves de su catálogo, por debajo de los dos minutos; prácticamente inverosímil en un directo de Rollins. El guitarrista Saul Rubin apoya un solo de Rollins que se desvanece entre lo real y la duda, entre el hombre y el coloso, entre la mitología y la carne.







Mixed Emotions pertenece además a ese grueso de temas que es difícil encontrar en la actualidad en discos de otros artistas: material musical más bien relacionado con el Tin Pan Alley; composiciones antiguas que en muchas ocasiones fueron flor de un día pero que existen en la memoria de Rollins, quien las trae de vuelta a la vida para regocijo de su auditorio. Someday I’ll Find You es uno de sus ejemplos más constantes. En este disco sucederá también con la elección de Mixed Emotions y Sweet Leilani.

Precisamente esa mezcla de emociones que nos hará sentir todo lo que contiene ese minuto y 50 segundos desembocará, cual anecdótico riachuelo, en el todo que es Sonny Rollins, llevándonos al océano de energía que ofrece el tema más potente del disco: Keep Hold Of Yourself, con un swing y una potencia a prueba de kevlar.






Retoma Rollins los homenajes con Disco Monk, su flirteo con el pop en recuerdo de Thelonious Monk, y H. S., el rítmico y bluesy tema que responde a las iniciales de Horace Silver, con un solo «puro Rollins», inventivo, infinito y único.





Entre Monk y Silver, el Rollins baladista —dulce, real, cálido, honesto— interpreta el estándar de Johnny Green You’re Mine You sin despegarse del saxo un solo segundo.






Pero es en este punto donde hemos de hacer un viaje a hechos que acontecieron hace casi 15 años en Manhattan, a pocas manzanas de la entonces vivienda de Sonny Rollins y su esposa, Lucille.

Este artículo de Nate Chinen para JazzTimes contiene —entre otras muchísimas palabras de valor— el relato de cómo, tras el choque del segundo avión contra las Torres Gemelas, Rollins tragó toda aquella «nieve» tóxica que se produjo. Tuvieron que esperar un día más para poder ser evacuados de su apartamento, de modo que intentó concentrarse en hacer lo que Rollins hace todo el tiempo: tocar, tocar y tocar. Pero no pudo. Su estado físico estaba tan afectado por la inhalación que vio clara la imposibilidad de tocar aquel día.

Lo hizo cuatro días más tarde, en el evento del que hemos hablado con anterioridad y que fue registrado en el imprescindible álbum Without a Song: The 9/11 Concert. Sin embargo, no se publicó el concierto completo por la inconformidad de Rollins con problemas con los micrófonos. Sí ha decidido hacerlo ahora, con el medley de los tres últimos temas de este cuarto volumen de la serie Road Shows, y que comprende Sweet Leilani, Solo y, por supuesto, el fin de fiesta habitual marca de la casa: el calipso Don’t Stop The Carnival.







La dolencia pulmonar de Rollins puede producirse por diversas causas, muy habitualmente idiopáticas, de modo que médicamente se baraja la posibilidad de que aquella nube tóxica pueda ser la razón de la fibrosis que afecta los pulmones más queridos del planeta.

Si hace apenas dos años confesaba Rollins que practicaba sin parar todos los días pese a haber dejado (en su voluntad temporalmente) los escenarios, ahora sabemos que incluso tocar la flauta es una actividad a la que no puede enfrentarse.

Su confianza en la ciencia y su colosal voluntad son elementos que no debemos subestimar. Quienes hemos tenido la suerte de escuchar al Coloso sabemos que sería un error.

Por eso, al otro lado del puente, entre la mitología y la mortalidad, estaremos esperando a Sonny Rollins en cualquiera de las formas en que quiera mostrarse, mientras este Holding The Stage queda apretado contra nuestro pecho, conteniendo toda su esperanza y desesperanza, agradecidos por un legado que deseamos que continúe.


© Mirian Arbalejo




Road Shows, vol. 4 – Holding the Stage
Doxy/Okeh. 2016




In a Sentimental Mood: Sonny Rollins – tenor saxophone, Bobby Broom – guitar, Bob Cranshaw – bass, Jerome Jennings – drums, Kimati Dinizulu – percussion

Professor Paul (Rollins: Sonny Rollins – tenor saxophone, Peter Bernstein – guitar, Bob Cranshaw – bass, Kobie Watkins – drums, Sammy Figueroa – percussion

Mixed Emotions: Sonny Rollins – tenor saxphone, Saul Rubin – guitar

Keep Hold of Yourself (Rollins): Sonny Rollins – tenor saxophone, Clifton Anderson – trombone, Stephen Scott – piano, Bob Cranshaw – bass, Harold Summey Jr. – drums, Victor See Yuan – percussion

Disco Monk (Rollins): Sonny Rollins – tenor saxophone, Mark Soskin – piano, Jerome Harris – bass, Al Foster – drums

You’re Mine You: Sonny Rollins – tenor saxophone, Clifton Anderson – trombone, Stephen Scott – piano, Bob Cranshaw – bass, Perry Wilson – drums, Kimati Dinizulu- percussion

H.S. (Rollins): Sonny Rollins – tenor saxophone, Bobby Broom – guitar, Bob Cranshaw – bass, Victor Lewis – drums, Kimati Dinizulu – percussion

Medley:
Sweet Leilani
Solo (Rollins only)
Don’t Stop the Carnival (Rollins): Sonny Rollins – tenor saxophone, Clifton Anderson – trombone, Stephen Scott – piano, Bob Cranshaw – bass, Perry Wilson – drums, Kimati Dinizulu- percussion





Comentarios

Entradas populares de este blog

JAZZ EN CONTENCIÓN [Entrega II] #JazzOnLockdown

  © John Fenton Lectores de todo el planeta se han convertido en la fuerza que da impulso al proyecto internacional Jazz On Lockdown (Jazz En Contención), una visión divulgativa y de apoyo a nuestra comunidad que se gestionó en un grupo de trabajo internacional dependiente de la Jazz Journalists Association. Aquí os cuenta cómo se forjó la idea John Fenton, nuestro colega de Nueva Zelanda. Desde nuestras antípodas, en diversos puntos del planeta se están haciendo eco de cada uno de los artistas cuyos conciertos han sido cancelados.  Nuestro cuartel general es la página web de la Jazz Journalists Association, donde hay un hueco diario para artistas de todo el mundo, incluyendo individualmente los aquí publicados. Allí podéis leer ya  JazzOnLockdown: In Spain, emotion amid unease from Pablo Martín Caminero .  Como podéis comprobar, nuestra meta sigue siendo firme: hacer sonar la música de los conciertos pese a las cancelaciones y no perder ni una nota aun viviendo bajo medid

Estándares de jazz: 7. 'My Favorite Things'

En ocasiones un segundo matrimonio supera con creces una relación anterior. Musicalmente hablando esto es lo que sucedió con el tándem artístico que formaron Richard Rodgers y Oscar Hammerstein II , a quienes se les considera el paradigma creativo del teatro musical del siglo XX. Efectivamente, ambos crearon una carrera profesional y una gran reputación con sus primeros colaboradores. En el caso de Richards Rodgers , su colaboración con Lorent Hart durante más de dos décadas dejó decenas de partituras de musicales tanto para Broadway como para Londres, así como composiciones para Hollywood para contrarrestar la depresión económica en la década de 1930. Posiblemente su musical con mayor repercusión sea Pal Joey . De entre los temas que compusieron a lo largo de esta colaboración, muchos se convirtieron en éxitos y, por tanto, gran número de estas piezas han pasado a formar parte del amplio abanico de estándares de jazz. Son composiciones de Rodgers y Hart Isn’t it Ro

Estándares de Jazz: 4. 'Caravan'

En ocasiones una decisión que puede en principio parecernos personal, simple y de repercusiones limitadas acaba teniendo un alcance imprevisto. Imaginemos a un niño nacido en el Puerto Rico de 1900 en el seno de una familia de músicos. Su tío, Manuel Tizol Márquez, era entonces considerado la figura puertorriqueña más destacada de la música instrumental tanto en el repertorio clásico como en el popular. El pequeño Juan Tizol —según testimonio propio— participaba en la banda de su tío Manuel cuando contaba con tan solo 8 años, y fue posiblemente por aquel entonces cuando tomó una decisión que habría de tener influencia tanto en su carrera como en la evolución de la música americana del siglo XX. La simple pero definitiva elección del pequeño Juan Tizol consistió en dejar el violín para entregarse al trombón de pistones, instrumento al que dedicó el resto de su vida. En 1920 viajó junto con su orquesta a los EE UU, donde, pese a no conocer el idioma —refiriéndonos con

Discos Favoritos de 2022 Y Una Reflexión Sobre Crítica Musical

  Supongo que todos tenemos unas costumbres no muy distintas a la hora de escuchar un disco: mirar la portada, leer los títulos y créditos, y, si somos muy afortunados, leer las cada vez menos presentes —y más necesarias— notas de los discos mientras escuchamos el álbum.     Las primeras notas de March On , el tema que abre el 16.º disco como líder de la compositora y pianista Lynne Arriale ( The Lights Are Always On ) ya provocaron una reacción emocional y de fuerte interés musical. Y era solo el comienzo de uno de los trabajos de representación y expresión histórica más destacables que recuerdo.     Como crítica, había un componente personal sobre el que estuve varios meses reflexionando: todos los temas de The Lights Are Alwayn On están inspirados en eventos de profundo peso de los últimos dos años, con una peculiaridad subjetiva, que yo había vivido y presenciado todos y cada uno de ellos. ¿Hasta qué punto mi reacción al disco del trío de Arriale estaba justificada en lo artísti

Cómo iniciarse en el jazz con una cierta seguridad de no acabar dejándolo para otra vida

Una de las preguntas que más temo pero que más me hacen es qué  escuchar  para iniciarse en el jazz.   Desde que utilizo las redes sociales, me topo con esta pregunta, como  mínimo, una vez por semana. Y ésa es la razón principal por la que me he   decidido a escribir este texto. Es imposible dar una respuesta general porque no existe un comodín que  responda a  los gustos personales de cada uno. Pondré como ejemplo al  aficionado al rock que  pide la recomendación; podemos sugerir piezas que  compartan un cierto lugar común , pero sin conocer la discoteca del  interesado  y sus inclinaciones dentro de su género  favorito, veo difícil crear  una norma  general que sirva para todos. A lo que sí voy a atreverme es a dar unas pautas que puedan compensar la ausencia de receta mágica; datos, recursos e incluso actitudes que a mí me han resultado de utilidad en estos 20 años de relación estable que llevo con el señor jazz.

Festival Internacional de Jazz Getxo: Unos apuntes sobre Gestión Cultural

Cuando existe la duda de si estamos siendo testigos de una era de cambios, la forma más rápida de encontrar una respuesta es fijarse en la gestión de la cultura . La transformación en la creación artística da sin duda pistas y es imprescindible para comprender períodos a medio y largo plazo, pero es la gestión cultural —y la diligencia y el celo en su apoyo y distribución— lo que marcará este aviso de forma más inminente.  El arte sobrevive . Siempre lo hará. Decía Aristóteles que el arte es la mímesis de lo humano , y hasta ahora su descripción sigue demostrándose cierta. De modo que aunque presenciemos altibajos en su desarrollo, el arte seguirá existiendo, curiosamente pese a y por  esas peculiares criaturas que resultamos ser . Un tema muy diferente es la logografía en torno al arte (sospecho que nuestra generación será la última que conviva con la crítica musical) y su gestión. El Festival Internacional de Jazz de Getxo cubre diversos frentes fundamentales en una

20 Buenos Discos de 2018

Del privilegio que supone haber escuchado tanta música valiosa, emocionante, atrevida, salvada de unas cajas o revelada en pleno insomnio, la única frustración que nos queda a quienes la devoramos es la certeza de que jamás podremos escuchar todos y cada uno de los discos creados a lo largo del año en el planeta. Es una de las razones por las que esta ya tradicional lista que publico el último día del año no lleva el familiar título de "los mejores discos del años". Son mis favoritos de entre algunos centenares. Tanta música de calidad llega a mí cada año... Ojala existiera la posibilidad de hablar de toda. Comenzaba 2018 con un disco en mis manos: Love, Time and Divination , del cuarteto de Nueva Orleans liderado por el trombonista Mark McGrain. Un disco que resultó siendo realmente significativo y lúcido en su título respecto a lo que estaba por venir: un encuentro entre la tradición y el presente, una apuesta por sacar adelante un trabajo en que el músico cree.  Cada v

50 Buenos Discos de 2021

Cada 31 de diciembre es tradición aquí celebrar la música publicada durante los últimos 365 días en cualquier formato: vinilos, cedés, casetes, digital, música autoproducida, salvada de alguna balda, apoyada por sellos que pertenecen a industrias pesadas o a otros creados por y para el talento. Las opciones siguen ampliándose (y a la vez reduciéndose) en esta irónica lucha de la música como expresión artística y modelo de negocio (si aún lo es). El 30 de diciembre pudimos ver la selección de la crítica en la 2021 Jazz Critics Polls , que dirije Francis Davis con la dedicada colaboración de Tom Hull. Hull, el hombre con los datos, cuenta que 156 críticos hemos votado 510 grabaciones diferentes en 2021, lo que sigue convirtiendo a dicha lista única en su naturaleza. Podéis leer la selección completa de los discos de jazz elegidos por la crítica internacional y las votaciones individuales.  La frustración vuelve a ser la protagonista por el número limitado de discos que podemos selecci

'Between Places'

Estos últimos meses he estado acordándome de un capítulo de la serie Perdidos ( LOST , 2004 - 2010). Su título es “?” y en él aparece una joven que vuelve a la vida tras haberse ahogado. Tiene después una conversación con uno de los personajes principales de la serie (Mr. Eko), haciéndole llegar un mensaje de Yemi, el hermano muerto de Eko, con quien supuestamente se encontró cuando estaba “ between places ”, o sea, entre sitios; en este caso entre dos mundos: el de los vivos y el de los muertos. Between places es la respuesta que podría dar básicamente a cualquier pregunta relacionada con cualquiera de mis aventuras y desventuras; sospecho que muchos de vosotros os veréis identificados con la expresión. Yuuko muy "between places" y mucho "between places". @CLAMP Una de las razones por las que os debía un texto aquí es volver a comunicarme con vosotros tras mi descanso en redes sociales (que, por cierto, son el paradigma del “entre lugares”: ni s

'Whiplash', una película sobre algo que no es jazz

El mes pasado tuvo lugar en España el estreno del filme Whiplash , segundo largometraje del director Damien Chazelle , responsable a su vez del guion tanto de la película como del cortometraje previo. Whiplash llegó precedida por una significativa retahíla de premios y nominaciones; opta, sin ir más lejos, a ser elegida la mejor película del año de los premios de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas, los comúnmente conocidos premios Ó scar . Será competencia del espectador decidir si ha encontrado emoción, inteligencia o entretenimiento en el filme, pero presenta algunos aspectos que quien firma este blog desea revisar. No existe el deseo de ofrecer análisis cinematográfico alguno, sino de aclarar ciertas consideraciones que merecen puntualización tras la estela dejada por la definición de Whiplash como una película sobre jazz . Es innegable que Whiplash parte del deseo de transmitir, como mínimo, un entorno jazzístico, pues sus dos protagonistas encarn